La mayoría de los quintanarroenses nos preguntamos,
¿hasta cuándo dejaremos de escuchar balaceras casi a diario?, ¿o la nota roja
seguirá reinando sobre las demás noticias? Son respuestas que no dependen en su
totalidad de la sociedad, sino de la participación de los gobiernos, las
instituciones y por supuesto, el ciudadano.
Soñamos con un Quintana Roo en paz, donde los visitantes
y los locales salen a divertirse en cualquier horario “sin ser molestado en su
persona”, ni por los policías de tránsito, ni por la policía turística; donde
no te piden “la mochada” para que no te infraccionen. También donde la revisión
que se hacen a esos centros de diversión, restaurantes, hoteles y demás
comercios, no tienen que dar “mordidas” a los fiscales para que no le inventen
multas.
Aspiramos a que los gobiernos se dediquen a eso, a
gobernar, a administrar el erario público de manera transparente, a darle
respuesta al ciudadano, en cualquier sentido, pero que no le hagan perder el
tiempo con la gestoría o la famosa frase, “venga mañana, el funcionario no
puede atenderle hoy”. No estamos de acuerdo con el enfrentamiento del gobierno
federal con el estatal, el estatal con el municipal, ni el municipal con las
alcaldías y las delegaciones; no concebimos que los políticos no se pongan de
acuerdo en lo más básico, como es el bienestar de los quintanarroenses.
Fantaseamos porque los que nos gobiernan dejen de cobrar
el famoso diezmo (aunque algunos ya piden el 20%), en cada obra o compra que
asignan; que no permitan el tráfico de influencia, la corrupción, el robo
hormiga, el dispendio de recursos públicos, obras de mala calidad, simulación
de compra de medicamentos, entre otras muchas prácticas que nos gustaría ver
erradicadas en los niveles municipal, estatal y federal.
Cómo nos gustaría ver que los delegados federales, los
secretarios de estado y los directores de dependencias municipales, se dediquen
a realizar su labor, hacer su trabajo comprometidos con la ciudadanía; seguro
estamos que, si les pagaran por resultado, no ganarían los jugosos sueldos que
provienen de los impuestos de todos los que vivimos en Quintana Roo. Que dejaran
los golpes bajos entre ellos, que ya no se guillen tanto y busquen la mejor
manera de trabajar en equipo, por el bien de todos los quintanarroenses, que
cuando vengan los visitantes, pues se lleven una buena imagen de los que nos
gobiernan.
Con toda fe, queremos que las policías, federal, estatal
y municipal sean un ejemplo mundial, que no haya extorsiones, que los asaltos
no existan, que verdaderamente se dediquen a salvaguardar la integridad física
de los ciudadanos; que no bolseen a los borrachitos, que no “siembren” pruebas
o extraigan confesiones por medio de la tortura.
También deseamos con todas nuestras fuerzas que la
impartición de justicia sea eso, no una simulación de los poderosos con los que
menos tienen; mucho menos las diferencias que existen entre los agentes
municipales y los agentes ministeriales, no importa quien detenga, quien
aplique, quien investigue, nos importan los hechos, los resultados; porque
hasta hoy, no hay detenidos por todos los hechos delictivos cometidos en este
año, mucho menos por los más de 70 asesinatos ya reportados en este primer
semestre.
Aunque todo esto es un “plan o sistema ideal de gobierno
en el que se concibe una sociedad perfecta y justa, donde todo discurre sin
conflictos y en armonía”, esperemos que los tres niveles de gobierno hagan algo
por las cabeceras municipales de Quintana Roo. Al tiempo…
SASCAB
Este próximo dos de julio llegará a Cancún, al parque las
Palapas, el presidente del partido Morena, Andrés Manuel López Obrador. Con su
llegada, los organizadores aprovecharán el momento para presentar a los
panistas, priístas, perredistas y demás personas que se suman al proyecto de
AMLO, muchos porque buscan ser tomados en cuanta para este 2018, pero las
cartas ya están echadas, las candidaturas tienen nombres y apellidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario